Desde la dirección del centro destacan que estas reformas no solo están orientadas a mejorar la calidad de vida de los usuarios, sino también a facilitar las tareas del personal que los atiende diariamente. Entre las modificaciones más relevantes se incluyen mejoras en la accesibilidad y la eliminación de barreras arquitectónicas, así como la incorporación de equipamiento moderno que permitirá un uso más eficiente de los espacios.
Rocío, Directora Adjunta del centro, subrayó la importancia de estas obras para la misión del centro. «Estas mejoras son un paso más en nuestro compromiso de cuidar y atender a nuestros mayores de la mejor forma posible», afirmó, destacando que los trabajos están planificados para garantizar que las actividades cotidianas de los residentes no se vean interrumpidas.
El acondicionamiento de los solariums tiene como objetivo ofrecer zonas de descanso luminosas y confortables, ideales para promover el bienestar emocional de los mayores. Por otro lado, la renovación de los comedores permitirá optimizar el servicio de alimentación, con espacios más amplios y adaptados a las necesidades específicas de los residentes.
Esta iniciativa refleja el compromiso del Centro de Mayores Madre de Dios con la atención integral de sus usuarios, poniendo el acento en su calidad de vida, seguridad y comodidad.